Cómo tratar el asma
Los tratamientos para el asma que existen tienen por objetivos finales controlar la inflamación, ayudar al enfermo a que pueda llevar una vida lo más normal posible y evitar que le afecten las sustancias que desencadenan los ataques. A día de hoy nos podemos encontrar con dos tipos de medicamentos para tratar nuestro asma:
-De control: Su utilización de prolonga en el tempo y son útiles para aquellos que padecen un asma moderado o grave. Para que hagan efecto tenemos que tomarlo cada día, incluso si no hemos sufrido ningún ataque.
-De alivio: También se conocen como medicamentos de rescate ya que se consumen cuando estamos en medio de un ataque. Es decir, cuando estamos teniendo problemas para respirar, tosemos en exceso, jadeamos, etc. A veces también se recomienda su uso antes de realizar alguna actividad deportiva, de forma que prevengamos esos síntomas.
¿Qué ejercicios son más saludables para aliviar el asma?
Entonces… ¿Es bueno que un asmático haga ejercicio? Desde luego, para cualquier persona es sano practicar deporte, aunque un asmático debe tener en cuenta que hay unos ejercicios mejores que otros en lo que se refiere a su enfermedad. Esto es porque cada uno necesita una cantidad de oxígeno diferente, y cuanto menos le exija será mejor para la persona que lo sufre. Vamos a ver qué tipo de ejercicios y deportes son más beneficiosos y seguros para un asmático.
-Natación: El ambiente húmedo y cálido de las piscinas es idóneo para evitar los síntomas de las crisis respiratorias. Podremos ejercitar nuestros pulmones y ponernos en forma.
-Yoga: El hecho de que se practique en espacios cerrados favorece que no se produzcan ataques. Conseguirá que relajes tu cuerpo y respires relajadamente. Además, podrás aprender a dominar tu cuerpo cuando se produzca la crisis.
-Caminar: Media hora al día será perfecta una camin para mantener la línea y, sin embargo, no hacer grandes esfuerzos. La clave está en no forzar. Si crees que fuera necesario usa una mascarilla para evitar que factores externos arruinen tu caminata.
-Ciclismo: Aunque la señalamos como una actividad buena tenemos que dejar claro que un asmático no debe desarrollarla durante mucho tiempo ni con dureza, si no que cosechará frutos practicando ciclismo montando durante cortos periodos. Como en el caso anterior, plantéate la necesidad de utilizar una mascarilla.
-Pesas: Debemos pensar en sesiones adecuadas al diagnóstico de cada uno. Con ejercitarse tres veces por semana en días alternos será suficiente. En cuanto a la rutina a llevar, lo ideal es hacer ejercicios muy variables y en general de acción local, es decir, que se centren en determinados músculos.
-Voleibol: Lo mejor de esta disciplina es que es un ejercicio que combina momentos de máxima aportación de energía con otros más tranquilos que requieren menos actividad, lo cual es perfecto para los asmáticos.
-Golf: Es un deporte tranquilo, que no exige sobrepasar los límites físicos, con lo que se hace abanderado de los asmáticos.
-Kárate: Es un deporte que suma dos factores muy beneficiosos. En primer lugar, se realiza en espacios interiores, lo que nos aleja de los factores externos negativos. Y en segundo lugar, combina momentos de gran esfuerzo con otros de menor.
-Ballet: Como en el caso anterior, se practica en el interior y no requiere una energía prolongada en el tiempo. Además, en este deporte se presta especial atención a los estiramientos, lo que lo hace aún más indicado.
-Esgrima: Una vez más nos encontramos con un deporte interior que no está sujeto a grandes esfuerzos, si no que requiere cierta intensidad de forma intermitente.
-Esgrima: Una vez más nos encontramos con un deporte interior que no está sujeto a grandes esfuerzos, si no que requiere cierta intensidad de forma intermitente.
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